La Temperatura del Color y su Importancia

La Temperatura del Color y su Importancia

La temperatura del color es un concepto de las ciencias físicas que se utiliza para asignar un valor numérico al color de la iluminación. Cabe mencionar que no describe la temperatura de las lámparas en sí.

Seguramente habrá notado que hay muchos tipos de luz blanca. Por ejemplo, los focos halógenos emiten un ligero tono amarillo, mientras que la mayoría de los focos fluorescentes tienen tonos blancos neutrales o ligeramente azules.

Los focos incandescentes aún se prefieren en ciertos diseños por su tono cálido, pero ya existen focos LED capaces de imitarlo.

Los focos LED se pueden fabricar con cualquier tono de luz blanca, desde cálida hasta fría. Incluso hay bombillos LED que permiten ajustar la temperatura del color e intensidad de la luz según las preferencias del usuario.

Como se mencionó anteriormente, la temperatura del color es un concepto de la ciencia física que se utiliza para describir el color de la luz emitida. En las especificaciones de lámparas y luminarias puede encontrarse como CCT, por sus siglas en inglés (correlated color temperature).

  • La CCT es la temperatura a la que se tendría que calentar un objeto teórico con cero reflexión de luz sobre su superficie, para hacerlo brillar con una tonalidad específica.
  • Por ejemplo, si una lámpara tiene una CCT de 2700 Kelvin, éste objeto teórico brillaría con la misma tonalidad si se calienta hasta 2700 K.

Aplicaciones de la Luz Cálida, Neutral y Fría

Al comprar un producto LED, es muy importante verificar su temperatura del color. De esta forma, se asegura el color adecuado para cada aplicación:

  • Luz Blanca Cálida: Las lámparas con CCT debajo de 3000K producen tonos cálidos, lo cual es apto cuando se busca crear un ambiente relajante. Es por este motivo que la luz cálida es común en hogares, hoteles, restaurantes y otras ubicaciones similares.
  • Luz Blanca Neutral: Las lámparas con CCT cercana a los 4000K producen tonos neutrales de luz blanca. Este tono es ideal en espacios donde se requiere concentración por largos períodos, lo cual lo vuelve ideal para la iluminación de oficinas y salones de clase.
  • Luz Blanca Fría: Cuando la CCT excede los 5000K, la luz comienza a tomar un ligero tono azul. La luz fría ofrece el mayor nivel de visibilidad, pero puede ser fatigante durante largos períodos de tiempo. Generalmente se utiliza para aplicaciones como iluminación exterior, áreas donde se realiza trabajo industrial de precisión, o galerías de arte.

Cabe mencionar que los tonos “cálidos” hacen referencia a valores de CCT bajos, mientras que los tonos “fríos” se refieren a valores altos. Por ejemplo, una lámpara con una CCT de 1000K emitiría luz roja, mientras que una con 15000 K de CCT estaría emitiendo luz azul.

La temperatura del color es un factor importante en los diseños de iluminación, ya que influye sobre el estado psicológico y la productividad del ser humano.

Existen productos LED para toda la gama de CCT. Hay bombillos de 2700K que imitan a los focos incandescentes, y hay luminarias exteriores de más de 5000K para brindar claridad durante la noche.

Es muy importante seleccionar un producto con una tonalidad de luz adecuada. Por ejemplo, si se utiliza luz fría en dormitorios, esta puede causar problemas de insomnio. De la misma forma, el uso de luz muy cálida en una oficina puede traer problemas de productividad.